JOSÉ MUGNOS

(1904 – 1982) Nació en Buenos Aires en el seno de un hogar modesto, y no pudo completar su instrucción primaria porque a los nueve años murió su padre y él debió contribuir al sostén de la familia como vendedor de diarios y lustrabotas. A los trece años marchó al campo y a su regreso, cinco años después, ingresó en el molino harinero donde trabajó toda su vida. Verdadero ejemplo de constancia y de fe, Mugnos fue autodidacta en todo.

Apenas conoció el ajedrez se interesó por las obras compuestas y con el apoyo moral de los amigos del Círculo de Ajedrez de Buenos Aires y su increíble capacidad de trabajo, pronto compuso algunos Estudios originales, con ideas nuevas y a veces tan profundas que por fuerza llamaron la atención de los incrédulos y de los entendidos.

Cuando ya tenía casi cuarenta años, dos de esos trabajos fueron enviados a un concurso de las revista «Chess» de Londres, donde ganó los dos primeros premios, y así dio comienzo su excepcional carrera en el ámbito internacional.

En 1957 Mugnos hizo un resumen de su fecunda labor de varios años en su primer libro, «Mis mejores finales», publicado porla Editorial SopenaArgentina. Allí, con sincera modestia y gran generosidad, expuso junto a las propias algunas obras de otros compositores argentinos, que al influjo de sus éxitos comenzaban a destacarse en el difícil arte de la composición ajedrecística.

Su segundo libro, «Finales artísticos razonados» que vio la luz diez años después en España, cierra una década de alejamiento de toda actividad ajedrecística motivado por serios problemas de salud. En esta nueva obra el autor publica 45 estudios inéditos, de los cuales 19 son propios y 26 en colaboración, casi todos ellos, con el Ing. Oscar J. Carlsson.

José Mugnos alternó siempre su actividad de compositor con una permanente labor periodística de divulgación y enseñanza del Estudio, la que comenzó en 1946 en la desaparecida revista «Enroque!!», de Necochea, y terminó en la revista «Ajedrez de Estilo», donde aún después de su muerte aparecieron los últimos artículos que el infatigable creador había dejado escritos.